- CATEGORÍA: Postre
- TIEMPO DE PREPARACIÓN: 60 minutos
- NUMERO DE RACIONES: 30 raciones
- DIFICULTAD: Baja
La receta
Esta receta de rosquillas es una receta de esas de abuelas y madres que dicen en sus notas de ingredientes: “a ollo” y “fariña a que admita”…ya sabéis. Me voy acostumbrando a esto y simplemente pesando lo que utilizo ya tengo una receta traducida a las necesidades de hoy.
Como ya comenté en otra ocasión el día 3 de febrero se celebra en mi pueblo la festividad de San Blas. Antiguamente hasta era día festivo, cosa que ya no sucede porque han preferido pasar el día festivo a otra fiesta. De todos modos, sí se sigue haciendo la misa especial y se llevan a bendecir las rosquillas en una cinta de raso.
Luego esa cinta se lleva todo el año colgada al cuello y te protege de los “males” de garganta. Recuerdo cuando era niña que en casa hacíamos “ristras” de rosquillas con una cinta para cada uno de la familia. Rosa para las niñas y azul para los niños. Si algún año no podíamos subir a la iglesia colgábamos de la galería las rosquillas para que se ahumaran de la “bendición”.
Aquí en Bilbao en cambio se celebra Santa Águeda el 5 de febrero y la gente lleva a bendecir unos cordones- mucho más bonitos la verdad- en vez de las cintas de mi pueblo, y que pasados 9 días hay que quemar. El efecto es el mismo, la protección de la garganta y sus males.
Aunque ya llevo aquí casi tres años no me había coincidido estar para esta celebración y es muy interesante. Salen cuadrillas a cantar por las calles la noche antes de la festividad de la Santa. Me ha gustado.
Rosquillas de anís
Ingredientes (Para unas 30 rosquillas según tamaño):
– 3 huevos medianos
– 125 g de azúcar
– 70 ml de leche entera
– 12 ml de aroma de anís o anís al gusto
– Ralladura de un limón y una naranja
– 50 g de mantequilla en punto pomada
– 1 Sobre de levadura Royal, polvo de hornear -1 sobre son 16 gr-
– 500 g de harina floja-repostería- + para espolvorear
– Aceite de girasol u oliva muy suave para freir las rosquillas
– Cáscara de 1 naranja
Preparación:
Batimos los huevos con el azúcar hasta que monten.
Añadimos la leche, el aroma de anís o anís seco y las ralladuras; batimos.
Ponemos la mantequilla en trocitos; mezclamos.
Unimos la levadura con la harina y la añadimos a la mezcla anterior a medida que haga falta hasta conseguir una masa húmeda y manejable.
Envolvemos la masa en film transparente y dejamos que repose en la nevera un par de horas.
Pasado el tiempo de reposo de la masa, ponemos al fuego una sartén con abundante aceite y en ella “freiremos” a fuego bajo la cáscara de naranja.
Dividimos la masa en trozos. Para formar las rosquillas tenemos dos opciones:
– Hacer bolitas de masa a las que abriremos un agujero en el centro.
– Hacer palitos de masa que uniremos por los extremos.
Sacamos las cáscara de naranja del aceite y freimos las rosquillas teniendo mucho cuidado de que no se quemen.- si usamos aceite de girasol, yo lo prefiero para repostería frita, debemos tener cuidado de que no alcance mucha temperatura, las freiremos a fuego medio-bajo, para que el aceite no se queme ya que no es como el de oliva-.
Cuando estén doradas por ambos lados, las colocamos sobre papel de cocina absorvente y una vez frías las espolvoreamos con azúcar glas–no me gusta bañar las rosquillas en glaseados ni rebozados de azúcar y las dejo así simplemente espolvoreadas de azúcar lustre, esto es al gusto de cada uno-.